Primavera, clases, hijos....vida!!

Mal que nos pese, la VIDA parece ser que consiste en tener problemas que no buscas pero te encuentras y tratar de resolverlos como buenamente puedas, aunque se resuelvan solos, tengan o no solución!!. No me preguntéis como llegué a esta conclusión porque ni siquiera sé si he llegado.
Todos los años se repite el mismo ciclo de las estaciones y cada año alucino más con el resurgir de la primavera, simplemente me encanta. No tengo fotos porque sabéis que soy de cámara antigua y no he terminado el carrete, pero camino de Lerma hay unos almendros que han empezado a florecer alucinantes. En Ávila tienen que estar los cerezos del Jerte a tope, aquí (en el valle de Caderechas y en Covarrubias) todavía no han empezado.
Pues los hijos son igual: trabajas por educarlos, tratas de cimentar ideas, que el día de mañana tengan una raíz fuerte,... pero tienen que pasar el invierno y en febrero, en plenas heladas (tormentas, broncas,) tienes que podarlos y cuesta un montón, pero hay que hacerlo y, lo que es más importante, hacerlo bien.
Hay que hablar mucho y reirse, y procurar no decir cosas que hieran. Dar importancia a lo realmente importante, ¿y qué es lo realmente importante?: que no estén, así que mientras estén hay esperanza y hay futuro.
Con los alumnos pasa igual pero, quieras que no, no son tan nuestros. Les aprecias, les cuidas y tratas de sacar lo mejor de ellos pero no es lo mismo, por eso aunque nos equivoquemos y duela, no lo sentimos de la misma manera.
En cuanto pueda pongo una foto de los cerezos en plena floración, como los adolescentes!!